EL CAPITALISMO SE DESPIDE
El capitalismo se despide
como era de esperar
sembrando hambruna y dolor
en el cuerpo y alma de los hombres
de las mujeres, de los niños azulados;
se despide poco a poco del mundo
lentamente siniestramente
sin dejar de hurtar casas y empleos,
conciencias libertades sueños.
El desempleo corre como río de sangre
los seres humanos no son ya seres humanos.
Los gobiernos, algunos muy preocupados,
no quieren que el gran capital se vaya.
Otros gobiernos, consientes y perseguidos,
ven por fin una lucecilla en el túnel,
un ligero mendrugo de esperanza,
una posibilidad de ser más dignos.
El capitalismo se despide
sin pena ni gloria
con su fracaso a cuestas, con su pequeñez
de pirata de segunda a cuestas.
No seré yo quien lo detenga.
No es el momento de tenderle una mano.
Cae el capitalismo
con el rostro de la vergüenza.
Enrique Sáez Ramdohr
19/02/ 2009